En casa de la familia Vilarejo todo ha dado la vuelta, como un calcetín. Han empequeñecido de tal manera que ahora viven, atemorizados, en el escondrijo del ratón Rimsky.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información