Una buena definición de Tato serÃa ésta: un tipo capaz de traicionar a su propia sombra, vago hasta las trancas, ordinario hasta decir basta y cuya única preocupación consiste en reunir el dinero -sin trabajar, por supuesto- necesario para pagar el alquiler del piso compartido donde habita. Con semejante currÃculum resulta complicado que la vida le sonrÃa. Pero a Tato le sobra moral para seguir sin dar un palo al agua y picaresca para hacernos reÃr, historieta tras historieta, con sus tronchantes ocurrencias.