Un viejo y mísero pescador vivía con su mujer en una barraca a la orilla del mar. Una mañana que echó su red al agua comprobó que pesaba muchísimo: ¡había pescado un pez de oro!.
Este sitio web utiliza cookies, tanto propias como de terceros, para mejorar su experiencia de navegación. Si continúa navegando, consideramos que acepta su uso. Más información