Un gato que nos recuerda al felino de unos dibujos animados y unos ratones traviesos, que se esconden debajo de las solapas o saltan cuando tiramos de las lengüetas, divertirán a niños y niñas al mismo tiempo que les enseñarán a identificar los colores, a conocer las formas geométricas, a contar hasta diez o a reconocer los contrarios.